Imparcialidad

No hace ninguna distinción de nacionalidad, raza, religión, condición social ni credo político. Se dedica únicamente a socorrer a los individuos en proporción con los sufrimientos, remediando sus necesidades y dando prioridad a las más urgentes.

Análisis del principio fundamental de imparcialidad El texto del principio fundamental de imparcialidad abarca los siguientes elementos:
  • el Movimiento no hace ninguna distinción, y esto no se aplica sólo a las que personas a las que ayuda o protege. Por no discriminación se entiende la negativa a hacer distinciones de naturaleza perjudicial para los seres humanos simplemente porque pertenecen a una categoría determinada. Ello no excluye las diferencias en el trato dado a personas colocadas en diferentes situaciones por razones, por ejemplo, de sexo o edad. Se mencionan cinco criterios que podrían dar lugar a discriminación: nacionalidad, raza, religión, condición social o credo político. Con todo, no se mencionan otros factores que podrían dar lugar a discriminación. Según las circunstancias, una diferencia de trato por razón del sexo puede o no constituir discriminación.
  • Todos los necesitados recibirán ayuda, pero tratar a todos de igual manera, sin tener en cuenta su grado de sufrimiento o la urgencia de sus necesidades, no sería equitativo. Imparcialidad significa que, para el Movimiento, la única prioridad que se puede establecer cuando se trata con personas que precisan ayuda ha de basarse en la necesidad, y el orden en que se distribuye la ayuda disponible debe corresponder a la urgencia del padecimiento que tiene por objeto mitigar.

Consecuencias del principio fundamental de imparcialidad El principio de imparcialidad tiene las siguientes consecuencias:

  • establece uno de sus valores clave: la no discriminación, que es uno de los elementos más importantes de todos los aspectos de la protección del ser humano: el derecho de los derechos humanos, el derecho humanitario, el derecho sobre los refugiados.
  • Aunque la necesidad de "conservar la confianza de todos" se menciona en el principio de neutralidad, ese imperativo se aplica también al principio de imparcialidad. Sólo una acción imparcial puede proyectar la imagen de una organización en la que pueden confiar las personas que necesitan ayuda o protección. Por lo tanto, se deben establecer sistemas para velar por que los beneficiarios de la acción de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja sean las personas de máxima vulnerabilidad.
  • La imparcialidad en su más auténtica acepción impone que se prescinda de las distinciones subjetivas. Veamos un ejemplo de la diferencia entre ambos conceptos: una Sociedad Nacional que se niegue a prestar sus servicios a ciertos grupos de personas, debido al origen étnico de éstas, no observa la norma de no discriminación; por otra parte, el empleado de una Sociedad Nacional que, en el ejercicio de sus funciones, favorece a un amigo al que otorga un trato mejor que el que se brinda a terceros, contraviene el principio de imparcialidad. Por lo tanto, se debe formar al personal y a los voluntarios para que el comportamiento debido sea casi un reflejo.